El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, expresó su firme apoyo a la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner (Frente de Todos), quien fue objeto de duras acusaciones por parte del Ministerio Público Fiscal (MPF) en la causa "Vialidad", en la que se investigan supuestas irregularidades en la ejecución de obras públicas en Santa Cruz durante la década "K".
A través de sus redes sociales, Evo Morales sostuvo este sábado que el "lawfare" es un "arma política de la derecha interna y externa", utilizada "contra dirigentes que defienden al pueblo". Y transmitió "solidaridad" a CFK. Además, el dirigente socialista comparó la situación que vivió el ex mandatario brasileño Lula da Silva con el escenario judicial que afronta la ex jefa de Estado argentino.
"En Argentina, como pasó en Brasil en 2018 con el hermano Lula, que fue víctima de un juez corrupto, se vive una ofensiva judicial en contra de la hermana Cristina Kirchner. El 'lawfare' es arma política de la derecha interna y externa contra dirigentes que defienden al pueblo", expresó Morales.
Además, reiteró su "solidaridad y apoyo a la hermana Cristina Kirchner". "Conocemos como dirigentes lo que significa ser perseguidos jurídicamente por derechistas que buscan eliminarnos políticamente. Nuestra defensa siempre será con la conciencia del pueblo, la verdad y la honestidad", agregó el ex mandatario boliviano.
"El lawfare no existe"
En la octava y penúltima jornada de alegatos del MPF, que se desarrolló este viernes, uno de los fiscales del juicio oral causa "Vialidad", Sergio Mola, dijo que el 'lawfare' "como construcción jurídica no existe" y "no es más que un entramado político que busca desacreditar hechos graves de corrupción".
Cristina Kirchner está acusada de haber liderado una supuesta asociación ilícita dedicada a extraer recursos del Estado a través de la adjudicación de proyectos de obras viales en favor de las empresas de Lázaro Báez.
Según los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, los funcionarios y ex funcionarios imputados en este expediente perpetraron anomalías administrativas destinadas a extraer millones de pesos del Estado, a través de las firmas del empresario santacruceño. La hipótesis de los investigadores es que, en realidad, "Lázaro Báez era Néstor y Cristina Kirchner".